La aventura está llegando a su fin.

Y el viernes llegó. Esta mañana estuvimos cada una en una clase, Virginia con Silvia y yo con Verónica. Al acabar las clases, nos reunimos las cuatro para hablar de cómo ha ido la semana, de lo que hemos aprendido, de si hemos encontrado alguna dificultad o hacíamos alguna propuesta de mejora.

El balance es muy positivo, nos hemos sentido muy seguras y a gusto durante estos días, hemos observado variedad de grupos, de colegios y de profesoras, conociendo el sistema sueco, aunque lo único que nos ha quedado por hacer y que hubiera sido interesante es ver una clase de español como idioma moderno ( una optativa que pueden elegir en el instituto ) para ver cómo trabajan con un grupo completo de alumnos, pero sabemos que ha sido por causas ajenas a nuestras anfitrionas.
Así que, terminada la reunión, hemos recibido un título que acredita que hemos estado aquí haciendo nuestro Job Shadowing.

Aprovechando que acabamos temprano, hemos cogido un tren a Malmö, alli hemos almorzado las famosas albondigas suecas en un restaurante que nos recomendó nuestro amigo Paco.

Hemos estado de tiendas, hasta que llegó la hora de volver al hotel. Teníamos que arreglarnos para ir a la fiesta que se celebraba en el Centro del Habla Materna de Lund, a la que nos habían invitado. Allí hemos charlado, participado en unos juegos, visto a un profe turco que ha tocado un instrumento y cantado canciones típicas de su tierra... En fin, completita. Las fiestas suecas también son bastante diferentes de las españolas.

A la vuelta al hotel, nos hemos hecho unas fotitos con la decoración navideña de una de las plazas de Lund, y hemos acompañado a sus paradas de bus a Silvia y a Verónica. Nos hemos despedido de ellas agradeciendoles todo lo que han hecho por nosotras.

Mañana un poco de turismo por Copenhage y vuelta a Málaga!